Pensé en denominar así este blog, porque si bien todos tenemos nuestros sueños, algunos con la dicha de verlos realizados, y otros siguen estando a la espera en la bandeja, aguardando el momento, y lugar justo, como en vida latente. Y pensé en estos últimos que nos quedan por asi decirlo "en el desván", que siempre están y que quizá son el motor de lo que realizamos diariamente.
Una de las tantas noches en que regreso a casa viendo la ciudad con los negocios cerrando y la prisa de todos en la mirada por llegar por fin a sus hogares, vi una inscripción en un carrito, de cartoneros, de los que abundan en una ciudad como la mia, y paradojicamente decia: "Soñar no cuesta nada", y pensé ellos que son buscas de todo aquello que se pueda intercambiar por unas monedas y esa frase... tan esperanzadora...
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